La Visión como punto de partida
Desde el mismo momento que entendí y me di cuenta del gran poder de la visión, me encargué de investigar, de manera disimulada, a cada persona con la que me relacionaba, para saber si tenían una visión y cuál era su alcance. Lamentablemente los resultados no fueron muy satisfactorios, pude darme cuenta que escasas personas, tenían una visión clara de lo que querían que fuera su vida en los próximos 5 o 10 años.
La visión nos acompaña desde muy pequeños, cuando jugamos imaginábamos escenarios y realmente creíamos que estábamos en ellos, nuestro poder para crear era impresionante; a medida que vamos creciendo nos vamos haciendo mas “realistas” y dejamos de soñar. Yo defino la visión como arte de soñar lo que queremos, de ver y sentir primero antes de lograrlo. He practicado, inconscientemente, el poder de la visión desde hace mucho tiempo y realmente puedo decir que me ha dado resultados.
Definitivamente creo que si queremos empezar una vida de paz y llena de éxitos debemos tomar la visión como punto de partida. Siéntate a visualizar tu futuro a corto, mediano y largo plazo, luego escríbelo, determina metas y planifica como lograrás alcanzarlas. No dejes que las circunstancias cambien tu rumbo, ante una situación en la que debes elegir una cosa u otra, será fácil escoger la que ayudará a lograr las metas que tienes planteadas.
Nunca dejes de soñar; una persona sin sueños suele ser una persona muerta de Fe y esperanzas. Dios siempre nos invita a soñar y a pedirle mucho de su abundancia, pues él tiene mucho para la persona justa Prov 22:4 “Riquezas, honra y vida son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová”.
Cuando quieres emprender una actividad, trabaja visualizando todo lo relacionado, mírate en el futuro, si no logras verlo con claridad es porque aún no tienes la suficiente FE en lo que quieres hacer, así que siéntate y trabaja en mas detalles que te ayuden a visualizar mejor, eso garantizará el primer paso del éxito, luego resiste a la oposición y toma decisiones en función a cumplir las metas que te propusiste.
Sé un soñador y pon en práctica un plan para lograr cada sueño. Nunca es tarde para soñar.
Saludos y hasta la próxima semana.
Simón Fernández